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Muchos de los ciudadanos y turistas que visitan diariamente la estatua de Sebastián de Belalcázar hoy se percatan que los muros adyacentes a este ícono de la ciudad, están limpios y pintados, generando un gran impacto visual. Esto gracias al compromiso ciudadano de un grupo de 40 jóvenes del Instituto Nacional de Enseñanza Media Diversificada (INEM), la Policía Nacional y l la empresa privada.

Los jóvenes, al mando del intendente de la Policía John Guarín, desarrollan jornadas de ornato, embellecimiento y recuperación del patrimonio cultural y natural de la ciudad, convocando a la empresa pública y privada para “que las cosas se conserven y vean mejor”.

Los últimos sitios impactados positivamente con esta tarea son la Colina de San Antonio, la estatúa de Sebastián de Belalcázar y el Gato de Tejada, donde recientemente bañaron a todas las gatitas y recolectaron residuos sólidos.

Estos jóvenes, cuyas edades oscilan entre los 15 y 18 años, constituyen un ejemplo de voluntariado, donde cada acción la hacen con mucho amor. Ellos madrugan a los sitios, realizan jornadas lúdicas y pedagógicas;  se capacitan en normas sobre Leyes Generales de Cultura y de Turismo y reconocen los bienes muebles e inmuebles de la ciudad. 
Elizabeth Muñoz