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9 años de edad, 24 medallas, campeón nacional y panamericano de  esgrima, hablan de la perseverancia y entrega con la que Isaac Camayo Guerrero practica su deporte: la esgrima.

Según Isabel Guerrero, su mamá, Isaac con tan sólo 4 añitos se la pasaba rompiendo todos los objetos de su casa, jugando a las espadas. Fiel seguidor de la novela de los tres mosqueteros, soñaba con parecerse a Athos, Porthos, Aramis o D´Artagnan, protagonistas de la famosa obra literaria.

Con suerte, en su colegio a través de una actividad lúdica ofrecieron la clase de esgrima. Isaac asistió por primera vez y desde allí, su pasión tomó vuelo.

A los 5 años y medio logró su primer oro en unos Juegos Departamentales en Buga, luego vinieron dos nacionales, donde también barrió con las medallas de oro. En el 2014, fue escogido como deportista revelación por la Federación Nacional de Esgrima en la categoría pre párvulos. Pasó entonces a representar a Colombia en unos Juegos Panamericanos en Perú en el 2015 y ganó nuevamente el primer podio.

La final se la arrebató a un niño de Argentina. La bandera de nuestro país se alzó por primera y única vez durante ese torneo.

“Esa competencia la logramos con las uñas. Fue muy difícil porque no contábamos con presupuesto ni con entrenador. Tuvimos suerte porque el equipo de Risaralda llevó dos profesores. Ellos fueron quienes apoyaron a Isaac. Le dijeron que él no era rival, que representaba a Colombia y que sentían el deber patrio de apoyarlo. Ellos lo entrenaron durante nuestra estadía en Perú”, comenta Isabel, la mamá de Isaac.

Su segundo Panamericano fue en Costa Rica en la modalidad de clubes. Allí se alzó con una medalla de bronce en octubre del año pasado. “Se siente un orgullo muy grande como mamá. Ver su determinación cuando cae una y otra vez, cuando lo golpean y no puedo hacer nada por ayudarlo… es duro, pero él me da a mí lecciones de perseverancia y autocontrol”, afirma Isabel.

Isaac entrena dos horas todos los días en la liga ubicada en la unidad deportiva del Coliseo El Pueblo, administrada por la Secretaría de Deporte y Recreación de Cali. “Yo quiero ser un deportista olímpico. Mi sueño es lograr una medalla de esas. Así es como me veo y concentro todas mis fuerzas para lograrlo”, afirma este pequeño campeón que también quiere obtener el título de microbiólogo y que augura muchas más medallas para Colombia en esgrima.

Juliana Rosero Berrío