Tres veces a la semana durante 25 minutos, 160 niños en situación de discapacidad asisten a clases de fútbol, atletismo y natación, dentro del programa Centros de Iniciación y Formación Deportiva que ejecuta la Secretaría de Deporte y Recreación, beneficiando a más 30.000 niños y niñas de la ciudad.
Juan Esteban Ángel Borrero, titular del despacho señaló que “es importante brindarle a estos niños la posibilidad de realizar estas actividades de forma dirigida, porque está comprobado científicamente que la práctica deportiva ayuda no sólo al desarrollo mental, sino al desarrollo personal y espiritual, ellos son un ejemplo que la mente humana no tiene límites, que cuando uno se propone, puede conseguir lo que quiere”
Carlos Alberto Diago, coordinador del programa CIFD, explicó que este año se contrataron cinco monitores para atender a los niños del Instituto de Niños, Ciegos y Sordos y dos fundaciones de la comunas 6 y 15. “No se contaba con profesores para atender a estos niños y se buscaron profesionales especializados para dirigir su práctica deportiva. Los monitores se reúnen con ellos en diferentes espacios de la ciudad como el estadio Pascual Guerrero, las piscinas Panamericanas y en el complejo deportivo Jaime Aparicio”.
De acuerdo con Diago, los niños ingresan a partir de los cuatro años hasta que cursan segundo de primaria. En las diferentes actividades el objetivo de los profesores es potencializar sus habilidades deportivas.
“Nosotros trabajamos con ellos primero los valores y luego nos concentramos en la capacidad física. Los niños beneficiados tienen discapacidades que van desde la ausencia de la visión y audición hasta la distrofia muscular y parálisis de medio o cuerpo total. Buscamos formar futuros deportistas y por ende ciudadanos al servicio de la ciudad”, dijo Janer Tafur, uno de los cinco monitores.
Mónica Santacruz
Comunicaciones Secretaría de Deporte y Recreación.
