
En el marco de la implementación del Protocolo de Montreal en Colombia, la Unidad Técnica de Ozono generó una serie de acciones orientadas a la eliminación paulatina del consumo de las sustancias agotadoras de la capa de ozono (SAO), utilizadas en diferentes aplicaciones industriales a nivel nacional, como el sector de refrigeración y aire acondicionado, el cual es el de mayor creciente demanda en el país.
Por ello el Departamento Administrativo de Gestión Medio Ambiente, Dagma, realizará una jornada de capacitación y sensibilización para el uso ambientalmente adecuado de gases refrigerantes dirigidos especialmente a empresas industriales, técnicos y usuarios del servicio de refrigeración y aire acondicionado de la ciudad de Cali.
El evento se realizó en conjunto con el Ministerio de Medio Ambiente y desarrollo sostenible a través de la Unidad técnica de ozono, la CVC y el SENA.
Esta jornada se cumplió con el fin de sensibilizar y profundizar los procesos que se realizan en las empresas garantizando la implementación de las normas, las cuales han permitido establecer las obligaciones, restricciones, prohibiciones y requisitos para las personas, industrias y entidades que usan, producen, importan, exportan o comercian estas Sustancias Agostadoras de la capa de ozono.
Para Gisleine Santa, del grupo de Gestión Ambiental Empresarial del Dagma, la refrigeración y el aire acondicionado, representan los principales consumidores de sustancias refrigerantes, las cuales mal manejadas contribuyen negativamente a problemas ambientales más graves en la actualidad como el deterioro de la capa de ozono y el calentamiento global, “por esto es necesario establecer pautas de manejo en las diferentes etapas durante el ciclo de vida de estas sustancias y equipos que las poseen, desde su fabricación, distribución, uso y disposición final, que de ser aplicados por todos los usuarios, permitirán proteger el medio ambiente y por ende la supervivencia del planeta”.
Los resultados contribuyen significativamente a la mitigación del cambio climático, evitando la emisión a la atmósfera de más de 135 millones de toneladas de dióxido de carbono.
Jennifer Dorronsoro Torres