Con sus ojos embargados de tristeza, por tener que dar en adopción a Patas Blancas –su caballo-, Nelson Arce se acogió al programa de sustitución de carretillas por camionetas, que se inició en Santiago de Cali.
Entre lágrimas y sollozos, este caleño de 45 años, de piel cobriza marcada quizás por los inclementes soles y por las fatigantes faenas al lado de su equino, dijo que ha sido un momento muy duro, ya que está entregando no un hijo, sino a su padre, porque desde hace 13 años es el ser que le ha dado el sustento para sacar adelante a su familia.
“Soy padre de familia de cinco hijos y estoy casado con María Elena Vargas desde hace 24 años y ese caballito ha sido con nosotros muy especial porque es el que más trabajó y el que menos ganó, por eso las lágrimas que hoy derramo tienen un significado muy especial, ya que estamos arrancando una parte del alma, por eso ellos –mi familia– decidieron quedarse en casa, para no tener que sufrir esta pena”.
Con sus ojos todavía aguados anotó: “Ya no voy a volver a verlo, ya no lo contemplaré más ni le daré la comida que con esmero le preparo a base de salvado y miel, menos voy a oír sus relinchos, algo que es muy duro para el corazón”.
Una vez se subió a la camioneta de color blanco y placas ZTO 438, Nelson Arce mascullando aún su tristeza manifestó que desde ya empieza el proceso de buscar un nuevo proyecto dónde trabajar y darle el mayor rendimiento a la nueva adquisición.
“Comenzó otra etapa de nuestras vidas, fueron 33 años en el duro oficio de carretillero, pero desde ya se empieza a sentir un cambio fenomenal para mejorar y saber administrar de buena manera esta unidad de negocios que se nos dio dentro de este proceso de sustitución”.
De igual manera, sostuvo: “A nosotros no nos están sacando de mala manera, sino que por el contrario se nos dan muchas facilidades para cambiar como lo dice la ley, por eso he estado hablando con varios amigos míos para que tengan paciencia, que este proceso se va desarrollando para el bien y el progreso nuestro y de nuestras familias”.
Como Nelson Arce otros 21 hombres y mujeres que guiaban sus carretillas por las vías caleñas recibieron de parte del gobierno que orienta el médico Rodrigo Guerrero Velasco los nuevos automotores con los que se abrirán paso en los nuevos caminos que les depara la vida.
Una vez fue recibido bajo la supervisión de técnicos de saneamiento de la Secretaría de Salud Municipal, Patas Blancas fue entregado con todos los requisitos previos a María Isabel Palau Alvargonzález quien lo trasladó a una finca en Jamundí, donde quedó jubilado desde hoy, pasando a ser una mascota bien cuidada.
