
“Con nuestras acciones de control y verificación, demostramos que CaliDA ejemplo de respeto por los animales”.
Así se refirió el secretario de Salud Pública, Diego Germán Calero Llanes, al manifestar que un amplio grupo de médicos veterinarios y técnicos de saneamiento estuvieron presentes desde tempranas horas de la mañana y hasta que culminó la Cabalgata, revisando a los ejemplares que iban a participar o lo hicieron en este evento de la Feria.
Sostuvo el galeno que así como la municipalidad y sus autoridades implementaron acciones para minimizar los riesgos en la salud y la integridad de las personas asistentes a la Cabalgata o quienes lo hicieron como jinetes, también los equinos tuvieron todo tipo de consideración y respeto, por tanto el control fue estricto para salvaguardar la vida y la salud del animal.
Entre tanto, Wílmer Caicedo, director del Centro de Zoonosis, explicó que desde hace más de dos semanas se venían revisando los documentos que acreditaban la participación de los equinos en esta versión 56 de la Feria de Cali.
Subrayó que el personal sanitario de la Secretaría de Salud estuvo desde la madrugada de este 26 de diciembre verificando el estado en el que ingresaban los semovientes, para establecer que no fueran a participar hembras preñadas, ponis, caballos enfermos o con laceraciones o incluso otro tipo de animales como bueyes o équidos (de casco) no aptos.
Caicedo confirmó que la dependencia de salud dispuso a lo largo de los 5 kilómetros de recorrido del certamen ferial, seis puntos de control sanitario, coordinado por médicos veterinarios, con equipos de primeros auxilios y un sitio de hidratación para los equinos.
Finalmente, el director del Centro de Zoonosis dijo que se vio mucho respeto por parte de jinetes, amazonas y público hacia los ejemplares, lo que se constituye en un verdadero examen de cultura ciudadana y respeto por el animal, algo que ha ido mejorando en esta ciudad.
Gustavo Sánchez